Leópolis ha quedado al margen en general de los ataques regulares que han afectado por el contrario a la capital Kiev, y a otras ciudades que están más cerca del frente y de la frontera rusa
Drones rusos de fabricación iraní Shahed-136 alcanzaron este martes por primera vez la ciudad ucraniana de Leópolis, a unos mil kilómetros del frente, donde alcanzaron una «infraestructura crítica importante».
El alcalde de la ciudad, Andriy Sadovyi, anunció que no se produjeron víctimas y que el edificio sufrió daños «insignificantes».
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Por su parte, el jefe de la administración militar regional, Maksym Kozytskyi, contó que varios pisos del edificio y numerosas ventanas resultaron dañados en el ataque, que causó un incendio.
El tráfico del transporte público local fue temporalmente desviado de la calle en la que se sitúa el cuartel general de los Servicios de Seguridad de Ucrania, pero se reanudó hacia las 10 horas locales.
La zona del ataque está solo a unos cientos de metros del centro histórico, reconocido como patrimonio mundial de la Unesco y es la primera vez que esa zona de la ciudad sufre daños relacionados con un conflicto bélico desde la II Guerra Mundial.
Según el portavoz de las Fuerzas Aéreas ucranianas, Yuriy Ignat, los drones pudieron alcanzar Leópolis por un «déficit de defensas antiaéreas». Comentó en un programa de «Radio Liberty» que los medios disponibles están desplegados «allí donde más se necesitan», y mencionó grandes ciudades, infraestructuras, centrales nucleares y el frente.
Ignat subrayó que se necesitan los aviones de combate F-16 para complementar las defensas aéreas existentes ya que los aparatos «moralmente obsoletos» de los que dispone la Fuerza Aérea ucraniana no pueden derribar los drones.
Los grupos móviles de defensa aérea, equipados con armas, no resultan tampoco efectivos para repeler los ataques nocturnos, según dijo el portavoz.
Leópolis ha quedado al margen en general de los ataques regulares que han afectado por el contrario a la capital Kiev, y a otras ciudades que están más cerca del frente y de la frontera rusa.
Su infraestructura eléctrica sufrió ataques regulares durante la campaña rusa contra el sistema energético del país, aunque se pudo evitar que los últimos ataques de misiles y drones golpearan la ciudad.
En el día más trágico, siete personas murieron y 11 resultaron heridas en un ataque que ocurrió en abril de 2022 cuando un misil impactó contra una gasolinera.
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